La firma por parte del gobernador de Texas, Greg Abbott, de una serie de leyes estatales convirtieron en junio del 2021 a ese estado en un “santuario” para las armas de fuego, lo que generó en ese entonces preocupación por el potencial impacto que tendrían esas disposiciones.
Las siete leyes entraron en vigor el 1 de septiembre de 2021 que, entre otras cosas, permiten a los residentes de Texas portar armas de fuego en público sin necesidad de contar con un permiso, siempre y cuando sean mayores de 21 años.
