No se ha convertido en un imprescindible. Sin embargo, Rojas ha mostrado el potencial de pensar que, si Steve Cohen decide limpiar la casa, debería recibir otra oportunidad para dirigir en las Grandes Ligas.
El dirigente de 39 años ejemplificó lo agotador que ha sido su primera ronda, y lo duro que ha trabajado para mantener su alto nivel.
No hay razón para pensar que Brodie Van Wagenen se desharía de Rojas, a quien fichara en enero para reemplazar a Carlos Beltrán después del golpe del Astrosgate, de esta pequeña muestra. Por otro lado, no es una garantía de que Cohen, suponiendo que los otros propietarios lo aprueben para comprar a los Metros, retenga a Van Wagenen para dirigir sus operaciones de béisbol. Y si Cohen va en una dirección diferente, debe darle a un nuevo jefe de béisbol la autoridad total sobre el patrón.
Para ofrecer una crítica constructiva a Rojas, identificaría dos áreas en las que puede mejorar más, ya sea con los Metros o en otro lugar:
Cambios de lanzadores. Según Baseball-Reference.com, Rojas usó 4.2 lanzadores por juego durante la acción del miércoles, un poco menos que el promedio. En una época en la que muchos dolores de estómago por los ganchos rápidos, diría que Rojas no demostró ser lo suficientemente rápido con demasiada frecuencia.