Estas fotografías facilitadas el miércoles por la oficina del Sheriff del condado Hennepin, en Minnesota, el 3 de junio de 2020, muestran de izquierda a derecha a J. Alexander Kueng, Thomas Lane y Tou Thao, acusados de colaboración y complicidad en la muerte del afroestadounidense George Floyd. (Oficina del Sheriff del condado Hennepin vía AP)
La muerte de Floyd ha sido el detonante de una ola de manifestaciones por toda la geografía de Estados Unidos…..
Un juez de la corte del condado de Hennepin (Minnesota) impuso este jueves una fianza de 750,000 dólares a los tres policías implicados en la muerte de George Floyd que observaron impasibles cómo este pedía ayuda mientras su compañero Derek Chauvin le presionaba el cuello con la rodilla durante unos nueve minutos, incluso una vez que parecía haber pedido el conocimiento.
Estos expolicías son Tou Thao, J. Alexander Kueng y Thomas Lane, que este miércoles fueron arrestados y acusados por el fiscal general de Minnesota de ayudar e instigar el asesinato en segundo grado del que se le acusa a Chauvin.
La fianza fue establecida por el juez Paul Scoggin que estableció la siguiente comparecencia judicial de estos tres acusados para el 29 de junio.
La decisión se conoce en medio de las protestas que sacuden a EE.UU. desde la muerte de Floyd, ocurrida el pasado 25 de mayo cuando el afroamericano era detenido como sospechoso de haber utilizado un billete falso de 20 dólares en una tienda.
Por su parte, el fiscal elevó este miércoles la acusación contra Chauvin, que no tiene todavía fecha para su primera cita ante un juez, de asesinato en tercer grado a asesinato en segundo grado.
Según la legislación del estado de Minnesota, el asesinato en tercer grado es aquel que causa la muerte de la persona de manera no intencionada a través de un acto eminentemente peligroso y puede acarrear una pena de cárcel de no más de 25 años.
El asesinato en segundo grado, sin embargo, es el que ocasiona el fallecimiento de alguien sin intención mientras se inflige o se intenta infligir un daño y puede ser penado con no más de 40 años de prisión.
La muerte de Floyd ha sido el detonante de una ola de manifestaciones por toda la geografía de Estados Unidos, donde unas 40 ciudades han declarado toque de queda nocturno para tratar de frenar los desórdenes y saqueos en los que derivado algunas de las protestas.