Las víctimas fueron baleadas de muerte a “casi un estilo ejecución”.
Según el fiscal Roberto Freyer del Condado San Jacinto, se está revisando junto con la Policía si es posible incrementar la severidad de los casos. “Nosotros creemos que sí y queremos sustentar que lo que él cometió fue un homicidio agravado”, dijo Freyer.
Freyer, además, dijo que la fianza por cada uno de los delitos imputados a Oropesa subió a $1.5 millones, con lo que el monto en total se incrementó a $7.5 millones.
El fiscal reveló que hay dos personas consideradas de interés, Domingo Castilla y Divimara Lamar Nava, esta última pareja del presunto asesino, pero no su esposa, y que según autoridades estaba presente en la escena del arresto. En el caso de ambos se está investigando su posible rol en el intento de escape de Oropesa.
Domingo Castilla (izq.), Francisco Oropesa (centro) y Divimara Lamar Nava.