Por Tony Brito
Bonao crece de manera horizontal y vertical, con un aumento cada día en la cantidad de vehículos, Pasolas, motores peatones y negocios en calles y avenidas, por lo cual el caos y la ocupación de espacios públicos, especialmente en calles y aceras, son más abrumadores.
Caminar por las aceras de la mayoría de los barrios de Bonao se ha convertido en una acción imposible, debido a que propietarios de pequeños negocios y chiriperos de todo tipo han tomado estos espacios para instalarse de manera provisional o estable.
Talleres de diversos oficios, cafeterías, puestos de ventas de frituras, frutas, jugos, café, etc., mejor dicho, en las aceras, calles y espacios públicos de la ciudad de Bonao se fabrica, se repara, se cocina y se vende de todo, a expensa de los peatones y a las violaciones de leyes y disposiciones municipales.
La población tiene cifrada la esperanza en que el alcalde Eberto Núñez realizará los operativos de lugar, y dotar a la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte (DIGESETT) de Bonao de una grúa para que los vehículos que son mal estacionados se lo lleven y le apliquen una multa
Los peatones ya casi no pueden usar las aceras y a riesgo de su integridad física o cualquier eventualidad deciden hacerlo por las calzadas destinadas a los vehículos, con la salvedad de que muchas vías también son tomadas por negociantes (ponen mesas y carpas) o usadas como parqueo de ambos lados.
Pasan los días, semanas, meses, y años, van y vienen nuevas autoridades municipales y la única realidad es que todo empeora con el paso del tiempo, sin que la solución parezca llegar desde las alcaldías, el Gobierno Central, o de la misma providencia.