Inicio Béisbol DEPORTES: 50 años después de su retiro: Julián Javier será exaltado al...
La carrera del dominicano Juliàn Javier està relativamente de manera ìntegra ligada a los Cardenales de San Luis.
Aùn cuando fue firmado originalmente por los Piratas de Pittsburgh, fue con los Cardenales que este inmortal del Deporte Dominicano escribió un digno y largo historial como jugador en el bèisbol de las Grandes Ligas, a niveles tales que, por muchos años se le llegó a considerar el mejor segunda base dominicano de todos los tiempos en la Gran Carpa, antes de la llegada de Robinson Canò.
En efecto, un buen dìa de 1960, Javier, nativo de San Francisco de Macorìs, fue subido al equipo grande de los Cardenales. Desde entonces, comenzó a proyectarse y a ganar notoriedad como uno de los màs reputados intermedistas de su época en todo el béisbol de las Grandes Ligas.
Sus habilidades defensivas, inteligencia y elegancia en la posición cuatro, la eficiencia de su bate en los momentos apremiantes (fue un buen bateador de contacto)quedaron impregnadas en el devenir histórico de los Cardenales, organización que, a un mes de cumplirse 50 años después de su retiro oficial de las Mayores, ocurrido en septiembre de 1972, honrarà su nombre cuando lo exalte a su Salòn de la Fama, acontecimiento èste que se producirá el pròximo 27 de agosto, en Ballpark Village.
El extenso tiempo transcurrido, sin embargo, no resta valor, emoción ni satisfacción a tan alta distinción para Don Juliàn Javier, quien actualmente cuenta con 86 años de edad.
“Pese a que yo lo esperaba mucho antes, esto no le resta importancia a mi exaltación. Me siento igualmente honrado con ello. Para mi tiene el mismo valor, sin importar el tiempo. Es algo grande, que no se ve todos los días”, expresa emocionado Javier al ser cuestionado al respecto por este diario vìa telefónica desde su residencia en San Francisco de Macorìs.
Javier dijo sentirse satisfecho y agradecido de los Cardenales porque su nombre habrá de figurar al lado de figuras de la talla de:Stan Musial, Steve Carlton, Bob Gibson,Lou Brock, Ozzie Smith y otros.
“No todo el mundo llega hasta ahì. Es un privilegio estar junto a esos grandes jugadores”, estima Javier, quien a excepción de los Rojos de Cincinnati, equipo al que fue cambiado en 1972 por los Cardenales en su último año en Grandes Ligas, jugò toda su trayectoria con San Luis.
Stan Musial, un caballero
Al ser cuestionado sobre Stan Musial, a quien admirò como jugador y definió como su amigo, calificò a èste como un excelente pelotero y como el màs caballeroso que ha conocido.

En ese orden, recordó que jugò los últimos tres años de la carrera de Musial junto a èl (desde 1960 a 1963) y que su admiración era tanta por esta superestrella, quien es inmortal de Cooperstown, que le puso Stanley a su hijo –quien al igual que èl destacó en Grandes Ligas y en la pelota invernal- en honor al pelotero norteamericano, a quien se le llamò “El Hombre” y es considerado el màs grande jugador que ha pasado por los Cardenales.
“Musial era una delia como persona.Muy humilde, sencillo, buen compañero, muy respetuoso. Fue grande dentro y fuera del terreno de juego, con eso te digo todo. Nosotros hicimos una muy buena amistad”, precisó Javier.
Observò que era superbo como jugador y su carisma y popularidad eran tan inmensa que, “cuando llegaba a un lugar, era como si hubiese llegado un presidente, la gente de inmediato lo asediaba y querìa tomarse fotos con èl y que le firmara autógrafos”.
Antes había màs calidad
En otro orden, con relación a la diferencia entre el bèisbol de ayer y el de hoy, Juliàn Javier considerò que en el pasado había jugadores de mayor calidad que en el presente.
“Antes la clase era superior. Los jugadores eran mucho mejor que los de ahora. Actualmente lo que hay es mucho dinero. Què jugador de este tiempo puede compararse con Musial, con Ted Williams, con Willy Mays, por ejemplo, ninguno”, enjuiciò.
Su historial
Nacido el 9 de agosto de 1936, en la localidad de La Guibia, San Francisco de Macorìs, desde temprana edad, Javier, mostrò poseer grandes virtudes para la pràctica del bèisbol.
Luego de destacar en diversos torneos que se celebraban en su natal San Francisco de Macorìs y en La Vega, Javier fue reclutado para integrar la selección nacional que participò en los Juegos Panamericanos de 1955,en Mèxico, en donde la Repùblica Dominicana ganò la medalla de oro.
Poco después, fue firmado por el busca talentos estadounidense Howie Haak para los Piratas de Pittsburgh, conforme lo establece el libro 500 Grandes Atletas Dominicanos, del periodista Kennedy Vargas.
En la pelota dominicana iniciò su participación en la temporada 1955-56 con el equipo de las Aguilas Cibaeñas, con el cual jugò toda su vida en el país.
En la liga dominicana, Javier solo jugó hasta la temporada de 1973-1974, en donde de por vida promediò 253, fruto de 303 hits, entre ellos 32 dobles, 15 triples y 16 cuadrangulares en 1,197 turnos al bate.
En el béisbol organizado de los Estados Unidos se inicia con el equipo Brunswick sucursal de los Piratas, en donde agotó 50 turnos en 18 partidos. En esa ocasión conectó nueve imparables, entre ellos ocho sencillos y un triple.
El 28 de mayo de 1960 debutò en las Mayores con los Cardenales de San Luís, en donde exhibiò todo su potencial como jugador regular por màs de una dècada.
`En esa temporada logró conectar 107 imparables, entre ellos 19 dobles, ocho triples y cuatro jonrones, además de una impecable demostración defensiva en la segunda base. En esa ocasión en el aspecto defensivo realizó 272 outs, 338 asistencias y cometió 24 errores.
En la temporada de 1962 anotó 97 carreras, su mayor cantidad en las Grandes Ligas. Mientras que en el año de 1964 remolcó 65 vueltas, su máximo número en ese renglón.
En 1967 bateò su mayor cantidad de cuadrangulares con un total de 14. En 1969 pegó 28 dobles, su mejor marca en esa clase de batazos.
Participó en las Series Mundiales de 1964, 1967, 1968 y 1972-esta última con Cincinnati-. En su primera oportunidad no tuvo turnos oficiales al bate, pero anotó una carrera. De hecho fue campeón mundial con los Cardenales en las dos primeras (64 y 67).
Jonròn històrico
En la serie de 1967 ante los Medias Rojas de Boston conectó nueve imparables en 25 oportunidades para un promedio de 360, que incluyó tres dobles y un cuadrangular. En la ocasión se convirtió en el primer dominicano en conectar un vuelacercas en una serie mundial.
En el segundo partido de la serie conectó un doble en la octava entrada para romperle un no hitter al lanzador derecho Jim Lonborg.
En el Clàsico de Otoño de 1968, Javier, quien fue dos veces al Juego de Estrellas (1963,1968, este último año fue el Màs Valioso) conectó nueve hits en 27 oportunidades para un promedio de 333.
En 13 temporadas en liga grande, bateò para 257 de promedio con 78 jonrones, 722 carreras anotadas y 506 remolcadas.
Tras su retiro, en el béisbol invernal Juliàn Javier fue manager de los equipos: Aguilas Cibaeñas, Leones del Escogido, Caimanes del Sur y Gigantes del Cibao.
Fue exaltado al Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano el 22 de octubre de 1978.