En un evento sin precedentes, el Papa Francisco celebró este martes una misa en la explanada de Taci Tolu, en Dili, Timor Oriental. La ceremonia reunió a 600.000 personas, aproximadamente la mitad de la población total del país, que es el más católico del mundo, excluyendo el Vaticano.
Un evento multitudinario y emocionante
La presencia del Papa Francisco en Timor Oriental ha sido un acontecimiento histórico para el joven país de 1,3 millones de habitantes. Las autoridades locales estimaron que la explanada de Taci Tolu y las áreas circundantes estaban abarrotadas con fieles, en uno de los eventos más multitudinarios del pontificado de Francisco en relación con el tamaño de la población.
Desde el lunes, la capital Dili y otras partes de Timor Oriental han visto una afluencia masiva de fieles, no solo locales, sino también peregrinos de Indonesia, Timor Occidental y Australia. Muchos asistentes estaban vestidos con camisetas conmemorativas y portaban paraguas amarillos y blancos, los colores del Vaticano, creando un ambiente festivo y eufórico.
Un Regreso Cargado de Significado
La explanada de Taci Tolu, que también fue el escenario de una misa celebrada por San Juan Pablo II en 1989, tiene un significado profundo para los timorenses. En esa época, Timor Oriental estaba bajo la ocupación indonesia y la visita de San Juan Pablo II destacó las luchas por la independencia. Hoy, el lugar simboliza la libertad y la esperanza para el país.
El Papa Francisco fue recibido con danzas tradicionales y se tomó el tiempo para saludar a los fieles antes de la misa. Debido al calor, recorrió la explanada en papamóvil tras la ceremonia para interactuar con los asistentes.
Papa francisco insta a la protección de los menores
Durante su homilía, el Papa Francisco, en español con traducción al tetum, destacó la alegría del nacimiento de un niño y la vitalidad del país. En un momento de especial relevancia, hizo un llamado a la protección de los menores, subrayando la importancia de acoger, cuidar y hacer espacio para los niños en la vida comunitaria.
El Papa también hizo un llamado a la humildad y al servicio, instando a los fieles a no temer «hacerse pequeños ante Dios y los unos frente a los otros» y a ofrecer tiempo y dedicación a los demás. Este mensaje es particularmente significativo en un país que, hace unos años, se vio sacudido por el escándalo de abusos del obispo Carlos Ximenez Belo, galardonado con el Premio Nobel de la Paz en 1996.
Conclusión de la visita y próximos pasos
El Papa Francisco concluirá su visita a Timor Oriental. El mismo con un encuentro con jóvenes antes de dirigirse a Singapur, su última parada en la gira por Asia y Oceanía. La visita del Papa es un hito importante para Timor Oriental, marcando un capítulo significativo en la historia religiosa y social del país.
