El expresidente Donald Trump ha resumido la crónica que replicará para la historia sobre el atentado del que fue objeto el sábado cuando arengaba ante una concentración de seguidores en Butler, Pensilvania, al decir que: “Recibí un disparo de bala que me atravesó la parte superior de la oreja derecha…”
Agentes de seguridad mataron a Thomas Matthew Crooks, de 20 años, la persona que habría disparado contra Trump, cuyos disparos segaron la vida de un asistente el mitin y causado heridas graves a otros dos, en un incidente que reencauzará la campaña electoral y los comicios presidenciales del 5 de noviembre.
Trump dijo que “oí un zumbido, disparos, e inmediatamente sentí la bala rasgando la piel. Sangraba mucho y entonces me di cuenta de lo que pasaba”, lo que pudo convertirse en tragedia mayor de impredecibles consecuencias políticas para Estados Unidos.
El Buró Federal de Investigaciones (FBI) indaga las causas que indujeron a Matthew Crooks a disparar contra Trump, o si hubo complicidad en el atentado, aunque se resalta que el atacante figura como afiliado al Partido Republicano, pero también como aportante con 15 dólares al Partido Demócrata con apenas 17 años.
Ese suceso atrajo de golpetazo a la memoria histórica de la sociedad estadounidense los magnicidios de los presidentes Abraham Lincoln y John F. Kennedy; el atentado contra Ronald Reagan y el asesinato del líder de los derechos humanos, Martir Luther King.
La campaña electoral de cara a las elecciones del 5 de noviembre, que estuvo centrada en torno al pedido de que el presidente Joe Biden renuncie a la candidatura a la reelección por supuesta incapacidad mental, se sustentaría a partir de ahora básicamente en el atentado contra el candidato Donald Trump.
Lo acaecido el sábado en Pensilvania tendría repercusión sobre una convulsa agenda global, que incluye la guerra entre Rusia y Ucrania, el drama de la Franja de Gaza, las crisis de Medio Oriente, Península de Corea y el Estrecho de Taiwán, cuyos desenlaces están vinculados con los resultados de las elecciones en EUA.
El intento de asesinato el sábado del expresidente Trump constituye un acto terrorista que la sociedad estadounidense y el mundo condenan con toda energía, porque estuvo a punto de provocar una crisis de grandes proporciones en Estados Unidos y, obviamente en todo el mundo. Por suerte, la bala apenas rozó “la parte superior de la oreja derecha” del candidato republicano.
