Con el peso de una racha de cinco derrotas consecutivas acompañándolo al montículo para su tercera apertura en Grandes Ligas, el nativo de Bonao Deivi García le dio a los Yankees exactamente lo que necesitaban.
El lanzador de 21 años tiró siete entradas de pelota de dos carreras, mientras que Gleyber Torres lideró una ofensiva que apoyó a su abridor novato, ayudando a los Yankees a una victoria de 7-2 sobre Toronto, que terminó con su racha.
La victoria detuvo una cadena de cinco derrotas consecutivas para los Yankees, que habían perdido 15 de 20. También los movió a dos juegos de los Azulejos en la carrera por el segundo lugar en el Este de la Liga Americana.
“Por supuesto que está en tu mente. Nos encontramos en una racha perdedora, pero no lo veo como una presión. Lo veo más como una responsabilidad”, dijo García. “Para que yo nos dé una oportunidad. Disfruto competir y ser agresivo en el montículo. La competencia en sí me gusta eso”.
García permitió cinco hits, ponchando a seis sin dar un pasaporte. Retiró a 15 de los últimos 16 Azulejos que enfrentó.
El joven derecho García mantuvo a Toronto fuera del pizarrón hasta el séptimo, y le dio la ventaja a Zack Britton, quien lanzó un octavo sin anotaciones. Aroldis Chapman ponchó los tres oponentes en el noveno.
Armado con una bola rápida que puede llegar a mediados de las 90 pero incluso a velocidades más lentas tiene mucho engaño para los bateadores, García mostró su coeficiente intelectual de pitcheo cuando llegó el momento de enfrentar el orden de los Azulejos por tercera vez. Se alejó de una bola curva regular y se movió hacia el resbalón y el cambio.
“Tengo mucha confianza en el resbalón y el cambio de velocidad”, dijo García, quien realizó 95 lanzamientos. “Se trataba de cambiar el nivel de sus ojos la tercera vez y demostrar que puedo ejecutar esos lanzamientos. Realmente me gustan esos lanzamientos clave para resolver”.
Cuando García terminó el séptimo, mostró su palma derecha al personal médico en el banquillo, lo que indicaba que se había desarrollado una posible ampolla. “No es un problema, no es un problema”, dijo García.
Después de permitirle un jonrón de dos carreras a Derek Fisher en la segunda, García retiró a 18 de los últimos 20 Azulejos que enfrentó, trabajando con una bola rápida, un cambio y un resbalón engañosos. También retiró a los últimos ocho bateadores.
