SANTO DOMINGO.- El merenguero Sergio Vargas aclaró que ocupaba bienes incautados por la Procuraduría General, entre ellos un local comercial y un apartamento en esta capital, porque desde hace cuatro años tiene un acuerdo con esa institución, a la que ofrece conciertos en recintos carcelarios a cambio de ello.
«El Negrito de Villa» dijo que su verdad es «más dura que el acero» y que su filosofía ha sido no reñir con la Ley ni ofender a Dios.
Explicó que ocupaba bienes que habían sido incautados por la Procuraduría General de la República, entre ellos un local comercial y un apartamento en esta capital, porque desde hace cuatro años tiene un acuerdo con esa institución, a la que ofrece servicios de conciertos en recintos carcelarios a cambio de la asignación de un bien inmueble en calidad de custodia.
“Para estos conciertos, la Procuraduría solo da el permiso y la autorización en cuál recinto se va a realizar, y yo lo pongo todo. Si tuvieran que pagar tendría que pagar 500 mil pesos por cada presentación”, indicó.
Dijo que, hasta el momento, solo ha ofrecido cinco conciertos antes de la pandemia y uno después, lo que equivale a un costo de tres millones de pesos.
“Estas presentaciones a los privados de libertad, no solo las realizo en el país, también he cantado en las cárceles de Panamá y Colombia. Me he propuesto hacer estas actividades como una especie de ofrenda que me asigné en la vida”, dijo.